Dos audiciones públicas, a las 11hs y a las 12hs, en el Centro Cívico La Jota, mostrarán los avances de intérpretes con otras capacidades y con autismo y varios alumnos de la asociación Betovi

El innovador proyecto “Música con violín” impulsado por Fundación CEDES ofrecerá este domingo, 24 de marzo, dos conciertos, a las 11 y a las 12hs, en el Centro Cívico La Jota, con acceso libre hasta completar aforo. Participarán como intérpretes cincuenta usuarios y alumnos del Centro Ocupacional y el Colegio de Fundación CEDES junto a otros alumnos de la asociación musical Betovi. Con actuaciones individuales y grupales,  y dirigidos por la violista profesional y musicoterapeuta Julia Lorenzo, unos y otros se alternarán sobre el escenario interpretando breves piezas musicales de Alfarás, Suzuki, Bayly, Becker o el alegre pizzicato del pingüino, que mostrarán sus notables avances y progresos.

“Música con violín” de Fundación CEDES, es un proyecto pionero en España, y desde hace ya tres años, viene demostrando que las artes son un espacio de libertad al que las personas con discapacidad y con autismo se acercan sin limitaciones y con naturalidad. La iniciativa surgió al observar las reacciones e interés especial que generaron varios conciertos de música clásica celebrados para los usuarios de los centros de CEDES, por lo que se apostó por poner al alcance de personas con discapacidad y con autismo una nueva experiencia artística para su desarrollo personal. Como resultado de esta iniciativa, todos los usuarios de Fundación CEDES participan en el programa, bien en audiciones o en clases individuales y grupales, de la mano de la violista Julia Lorenzo, que aplica un método en el que adapta tiempos, intensidad y formato.

“Utilizamos unas partituras accesibles con colores, colores que también ponemos en el violín para que los alumnos puedan asociar el color de la partitura con el color de la cuerda que tienen que tocar y ha funcionado muy bien”, explica la musicoterapeuta. Para Julia Lorenzo “cada día es un descubrimiento de lo bien que llegan a tocar”.

La respuesta en las personas con autismo es sorprendente incluso para la profesora. El violín consigue que perfiles que tienen un comportamiento determinado, cambien radicalmente “cogen el violín y se transforman”. Curiosamente, el hecho de aprender a sujetar este delicado instrumento ayuda a muchos de los usuarios, acostumbrados habitualmente a adoptar posiciones rígidas que los mantienen tensos, a relajarse. Además, la capacidad de atención, concentración y disfrute que muestran los alumnos y alumnas es importante ya que favorece enormemente su desarrollo cognitivo, sensorial y comportamental.

La programación de conciertos abiertos al público, como el del próximo domingo, es importante para el desarrollo de este proyecto. Y en este sentido, la directora de la fundación, Teresa Muntadas, destaca su agradecimiento “a los alumnos de Betovi y sus familias que comparten encantados el concierto con nosotros y nos permiten hacer de él una preciosa experiencia inclusiva”.