Durante toda la semana, las ONGD llevarán a cabo distintas acciones de concienciación para conmemorar el Día Internacional contra la erradicación de la pobreza que se celebra el próximo sábado, 17 de octubre.
Según la FAS, la pobreza es cada vez más extrema, intensa y crónica, por lo que es urgente cambiar este sistema que genera riqueza para el 1% y un empobrecimiento generalizado para el resto de la población, tanto en nuestro país como en el resto del globo. Un sistema que fomenta la guerra para el control de los recursos, la destrucción de la naturaleza y las desigualdades sociales. Sabemos cuáles son los problemas y conocemos muchas de las causas estructurales que generan desigualdades; pero también sabemos que existen soluciones reales y factibles.
En el Estado español 1 de cada 5 personas se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión. Somos el segundo país de la UE con más pobreza infantil. La desigualdad no ha cesado de aumentar: en plena crisis, el número de personas millonarias aumentó un 13% entre el 2012 y 2013, lo que nos convierte en el segundo país más desigual de toda Europa. Además, a escala mundial, 1 de cada 9 personas carece de alimentos suficientes y más de 700 millones viven en la más extrema pobreza, de las cuales el 70% son mujeres. Las 85 personas más ricas del mundo tienen el mismo dinero que los 3.500 millones de personas más pobres del planeta.
Existen compromisos internacionales, como los recién acordados Objetivos de Desarrollo Sostenible, los protocolos de Derechos Humanos, la Carta de las Naciones Unidas, o el Protocolo de Kyoto, que necesitan ser cumplidos para garantizar un cambio de rumbo y el cumplimiento de los derechos de todas y todos o continuar por la misma senda del aumento de las desigualdades, pobreza y del autoritarismo.
Las ONGD de la FAS trabajan para visibilizar y combatir las causas de la pobreza, denunciar los incumplimientos de los compromisos internacionales y hacer propuestas que tratan de poner a las personas primero, exigiendo a los gobiernos el cumplimiento de todos los Derechos Humanos en todo el mundo. Y no pararemos hasta conseguir el mundo que queremos, un mundo sostenible, sin pobreza y sin desigualdad.
Por eso, desde la FAS lanzan las siguientes peticiones:
1.- Políticas públicas sociales para cumplir con los Derechos Humanos
Lo público debe seguir siendo el ámbito de actuación privilegiado para abordar los tres grandes desafíos de la nueva agenda de desarrollo hasta el 2030: la pobreza, la desigualdad y la insostenibilidad. Por ello es imperativo que los gobiernos aumenten las inversiones en políticas públicas sociales que garanticen el disfrute de los Derechos Humanos a toda la ciudadanía. Derechos que, no debe olvidarse, son civiles, políticos, económicos, sociales, culturales, laborales, medioambientales y de género.
2.- Objetivos de Desarrollo Sostenible con participación y transparencia
Es necesario que se desarrolle un plan de implementación de la agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible con la participación activa de la ciudadanía y un diseño ambicioso de los indicadores para su seguimiento. Las y los representantes políticos, las organizaciones de la sociedad civil y demás grupos de interés, han de estar involucrados en la planificación, el monitoreo y el seguimiento de los avances en el cumplimiento de los objetivos.
3.- Políticas coherentes con la justicia global
La universalidad de los Derechos Humanos, y el hecho de que la nueva agenda esté basada en ellos, implica que los compromisos han de aplicarse en los países ricos y en los empobrecidos por igual. Esto supone que es necesario un marco de políticas coherentes en todos sus ámbitos (regulación financiera, comercial, deuda, política ambiental, etc.), promoviendo los sistemas fiscales equitativos como una de las herramientas más poderosas para afrontar las desigualdades dentro de cada país.