El próximo viernes, 1 de abril, comenzará la VIII Muestra Muestra de Cine y Derechos Humanos de Zaragoza, que se prolongará hasta el día 8.

Hoy más que nunca la Muestra cobra todo su sentido y se hace absolutamente necesaria. Los acontecimientos recientes así lo indican. La crisis continúa afectando a numerosas personas y revela, una vez más, que el sistema económico dominante es injusto. Los líderes mundiales se empeñan en recurrir a la guerra como solución para curar enfermedades creadas por ellos mismos y sus antecesores, mientras otros solo ven en los conflictos intereses monetarios.

Los organizadores saben que no van a cambiar el mundo, pero quieren apoyar la labor de las personas y entidades que trabajan para ello. En esta edición, los dos temas principales son la discapacidad y el binomio guerra y dictadura.

El resto del viaje nos enseñará una imagen del Islam muy alejada de la que habitualmente se ve en los medios de comunicación, cuál es el verdadero liderazgo del mundo, la situación de la mujer y sus iniciativas para mejorar, la resistencia ante las dictaduras, la tortura institucionalizada en países democráticos y cómo la libertad puede esconderse en un programa de televisión. También se rendirá homenaje a dos cineastas iraníes, Jafar Panahi y Mohammad Rasolulof, condenados en su país a seis años de cárcel y veinte sin hacer cine solamente por hacer uso de su libertad de expresión y mostrarse contrarios al régimen imperante. Y, como siempre, las obras realizadas en Aragón o por aragoneses tendrán su propio espacio. Como novedad Huesca se incorpora a la Muestra. Para información detallada de lugares y horarios de proyección, podéis visitar el blog de la Muestra