Aumentar el parque de vivienda social, impulsar el alquiler y nuevos modelos cooperativos, principales propuestas de actuación ante la “emergencia habitacional”

La IV Jornada de la Cátedra Zaragoza Vivienda celebrada hoy ha puesto el foco en la “emergencia habitacional”

Aumentar el parque de vivienda social, impulsar el alquiler y nuevos modelos cooperativos, han sido las principales propuestas de actuación apuntadas por expertos y responsables políticos del Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno de Aragón, en la IV Jornada de la Cátedra Zaragoza Vivienda, dedicada a ‘La emergencia habitacional: estado actual y alternativas’, que se ha celebrado hoy en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza.

“La vivienda tiene que dejar de ser un producto financiero, y para ello hay que dar alternativas a la propiedad privada desde el alquiler, la movilización de la vivienda vacía y nuevos modelos cooperativos, con cesiones de uso”, ha apuntado en la inauguración Pablo Muñoz, consejero de Urbanismo y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Zaragoza. La directora de la Cátedra, Belinda López, también ha situado el origen de los problemas de la vivienda en España “en el hecho de que se vea más como un negocio que como un derecho, una cultura que se nos ha vuelto en contra». Ahora «queremos darle dar la vuelta a ese modelo y crear una cultura en la que el acceso a la vivienda se pueda realizar de otras formas, fomentando el alquiler”, y en este sentido, ha valorado que «tenemos la suerte de que nuestra administración pública se está poniendo las pilas en esto».

Así lo han confirmado las intervenciones del concejal de Vivienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Híjar, y la Directora General de Vivienda del Gobierno de Aragón, Maite Andreu. Híjar ha puesto sobre la mesa el dato de que en los primeros seis meses de 2017 los desahucios en la provincia de Zaragoza han aumentado y «han sido más de 700, solo en la primera mitad de este año». Por ello, ha señalado la importancia de seguir ampliando políticas como el programa de captación y movilización de vivienda vacía, actualmente con «100 viviendas firmadas y más de 80 familias que están alojadas», y también otros proyectos alternativos para la promoción de la vivienda social y pública, «como el que intentamos con la propuesta de rehabilitación del cuartel de Pontoneros o Las Fuentes, con servicios compartidos». Por su parte, Mayte Andreu ha señalado las acciones realizadas para incrementar las ayudas al alquiler y a la rehabilitación, promover modificaciones legislativas y la creación de una mesa para abordar el endeudamiento familiar. Asimismo también ha señalado la importancia del tercer sector en esta materia. Un punto de vista, el de las entidades y plataformas sociales, que ha protagonizado también una de las mesas redondas de la jornada, con la participación de Cáritas, Fundación RAIS y Stop Deshaucios, representadas por Marisa López, Noemí García y Concha Cano, respectivamente, que han planteado las alternativas y reivindicaciones de la iniciativa social ante la crisis habitacional. 

El modelo cooperativo quebequés

Max Gigling, Doctor en Psicología Social e investigador en políticas y estadísticas de vivienda, ha señalado a las Cooperativas como posible solución para una parte de la población con dificultades de acceso a una vivienda, y ha presentado el ejemplo del modelo quebequés de cooperativas de habitación, que ofrece vivienda asequible en alquiler desde hace 40 años. También ha apuntado que “se aplica ya en varios países como una tercera vía de acceso a la vivienda, entre el alquiler y la propiedad, un modelo en el que el propietario del inmueble es la cooperativa en su conjunto, y los cooperativistas son inquilinos”.

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