Mónica Randall se emociona al recordar sus raíces aragonesas en el homenaje que el Festival Manhattan ha rendido a la actriz y al cineasta Carlos Saura

·        Randall estuvo arropada por el padrino de esta edición, Luis Alegre, David Trueba, Ignacio Martínez de Pisón, Gonzalo Miró y Eulalia Ramón, que mantuvieron un encuentro divertido y emotivo que cautivó al público

·        Esta noche actuará la compañía de danza Giro, y las próximas citas del festival serán el 5 de agosto, con Oswaldo Felipe de la PAI y el puente del 10 al 14 de agosto con teatro protagonizado por mujeres

Murillo de Gállego vivió ayer uno de sus días grandes con el homenaje que el Festival Manhattan rindió a dos grandes de la cultura de nuestro país, el cineasta Carlos Saura y la mítica actriz Mónica Randall. La sala de teatro El Gato Negro se llenó con un público entregado que disfrutó con una tertulia divertida y emotiva entre la actriz, el periodista y comunicador Gonzalo Miró, el cineasta David Trueba, el escritor aragonés Ignacio Martínez de Pisón y Eulalia Ramón, actriz y cineasta que fue pareja de Carlos Saura durante los últimos 30 años. El encuentro, moderado por el padrino de esta cuarta edición del Festival Manhattan, Luis Alegre, comenzó a las 19:30 h con una emocionadísima Mónica Randall que, con la voz entrecortada, recordaba a su madre, que era de Gavín y sus maravillosos veranos en Aragón. No fue el único momento emotivo de la tarde, Eulalia Ramón, viuda de Carlos Saura tampoco pudo reprimir las lágrimas cuando sus compañeros de tertulia recordaron al cineasta con una profunda admiración y respeto a su figura al que Mónica Randall calificó como uno de los mejores directores del mundo afirmando que “trabajar con él fue una suerte extraordinaria”.

Durante más de hora y media que duró este encuentro, el público fue testigo de la buena sintonía entre los participantes, el cineasta David Trueba, que ha  vuelto a dirigir ahora a Mónica Randall en “Saben aquel” desató las risas entre los asistentes con su gran sentido del humor, al que por cierto, Mónica Randall hacía referencia constantemente ya que según contó ayer, a ella le hubiese encantado hacer comedia pero nunca se lo ofrecieron, “sólo me daban papeles de ricas y guapas y eso hizo que me alejase del cine”.

Luis Alegre fue el artífice de este encuentro entre amigos y consiguió que este doble homenaje a Saura y Randall se convirtiera en un evento inolvidable y repleto de anécdotas y complicidad. Alegre hizo un repaso de la trayectoria de Mónica Randall a la que definió como “una de las grandes actrices de los años 60, fue un referente para varias generaciones, como la mía y no sólo brilló como actriz, también fue una de las mejores presentadoras y comunicadoras de este país”. Este doble tributo a Carlos Saura y Mónica Randall culminó con la proyección en la Plaza de Murillo de Gállego de la película del cineasta Aragonés “Cría Cuervos”, protagonizada por Mónica Randall. Una de los momentos más divertidos y originales de esta gran fiesta del cine fue cuando Luis Alegre, Javier Fesser, David Trueba, Ignacio Martínez de Pisón, Eulalia Ramón y Gonzalo Miró, acompañados por el equipo del Festival Manhattan, con Alberto Castrillo-Ferrer a la cabeza, reprodujeron con motivo del 40 aniversario de la muerte de Buñuel, una de sus icónicas fotografías.

El viernes, el Festival Manhattan volvió a sorprender con una puesta en escena de altura en la apertura de su segundo fin de semana en Murillo de Gállego. La compañía D’Click desplegó en la plaza de la localidad y con un fondo de escenario único su espectáculo “Latas”.  Sorprendieron a los asistentes con sus malabares y acrobacias en el mástil chino, y se puso de manifiesto la esencia de esta compañía aragonesa que defiende el arte del circo como un arte vivo, con una dramaturgia teatral llena de imaginación, gestualidad y un gran sentido del humor. Su talento y el skyline del paisaje natural que los rodeaba maridaron creando momentos inolvidables.

Por la noche, el director de cine Javier Fesser y la directora del festival de cine de Huesca, Estela Rasal, fueron los encargados de dar el pistoletazo de salida a la gran fiesta del cine que vive este fin de semana Murillo de Gállego. Ambos participaron en un encuentro moderado por el director del Festival, Alberto Castrillo-Ferrer, en la sala Gato Negro. La cita concluyó con un maratón de cortometrajes del Festival de cine de Huesca, Notodofilmfest y películas Pendleton, la productora de Javier Fesser que fue padrino de la segunda edición del Festival Manhattan y desde entonces colabora de manera activa en él. El director asegura haber vivido “un auténtico flechazo con el Manhattan” y afirma que “es un regalo volver cada año”. Concluye que el éxito de este festival “es poder disfrutar de la grandeza de las actuaciones en un lugar pequeño y único”

Javier Fesser y Estela Rasa, que es de Murillo, pusieron en valor el esfuerzo y trabajo de los creadores audiovisuales y la calidad de los cortometrajes en nuestro país. La directora del Festival de Cine de Huesca destacó que “un cortometraje es una magnífica plataforma para encontrar talento”. Prueba de ello fueron los aplausos del público a los cortometrajes que se proyectaron tras la tertulia.